El 13 de julio de 1573 don Felipe II expidió el que ha sido considerado como el primer código de urbanismo de la Edad Moderna: un conjunto de disposiciones conocidas como las Ordenanzas de poblaciones, destinadas a las colonias españolas en América. Dichos documentos se articularon con actividades, derechos, costumbres y normas que ya tenían una tradición en América y que guardaban los vestigios de la legislación indiana. Interesado en esta temática, Jaime Salcedo Salcedo se dio a la tarea de reconstruir las relaciones estructurales del sistema urbano colonial español hasta sus orígenes, donde se encuentran algunas de las claves de su génesis y de su desarrollo hasta el siglo XVIII. De esta manera se evidenció el modo en el que se entremezclaron elementos como la astrología, la tradición y las supersticiones en la conformación de los modelos urbanos coloniales, los cuales estaban guiados por un modelo ciudad que era en gran medida ideal e imaginario. El resultado de esta investigación fue publicado en 1996 por el entonces Centro Editorial Javeriano y se convirtió rápidamente en un texto de referencia que renovó la discusión sobre el origen de la traza de la ciudad hispanoamericana.
A pesar de las décadas que han transcurrido desde su aparición, esta obra no ha perdido vigencia ni pertinencia: si bien se han realizado trabajos particularizados sobre el tema, su síntesis continental no ha sido superada ni cuestionada. De hecho, en un contexto en el que abundan las generalizaciones, las abstracciones, los preconceptos y las ideas vagas su riqueza documental y la rigurosidad de su investigación adquiere gran importancia. Por tal motivo, esta segunda edición busca reavivar y motivar caminos aún no explorados en el campo de los estudios del urbanismo, la arquitectura y la colonia al rescatar el trabajo y la memoria de uno de los más importantes historiadores de la arquitectura que ha tenido Colombia.