Si Séneca es un clásico es porque fue capaz de acuñar reflexiones que han interpelado a lectores de todas las épocas hasta nuestros días. Orador destacado de la Roma imperial, en estos ensayos nos presenta un pensamiento ecléctico, alejado de los dogmatismos, que va más allá de preceptos de la escuela estoica. Nos insta a pensar por nosotros mismos y a alejarnos siempre que sea necesario de las creencias de la masa para acceder a la felicidad, y nos propone, a la manera del sabio, limpiar nuestro día a día de ocupaciones superfluas como vía para alargar la vida. Recordatorios que parecen escritos expresamente para nuestro presente atareado y lleno de discursos homogéneos.