La seducción es una maravillosa oportunidad para conocer más acerca del otro y de conocerte para potenciar tus aspectos más virtuosos, para superar tus propias limitaciones. Mi propia experiencia me ha enseñado que puede aprender a seducir quien se lo proponga, y por eso transmito mis creencias y conocimientos con seguridad, firmeza y convicción. Solo es necesario tener ganas, voluntad, capacidad de observación y saber tomar lo mejor de la experiencia. Propia y ajena"