Sam es un poco torpe. Cuando ella está cerca, siempre ocurre algún accidente.
Por eso no les cae muy bien al resto de sus compañeras del equipo de baloncesto.
Pero todo está a punto de cambiar.
Sam ha conocido a alguien capaz de concederle tres deseos.
Qué lástima que Sam tenga tan mala pata a la hora de pedirlos